Por tanto, esta reflexión "Si lo crees, creas", considero que viene a colación con lo puesto en común con la asignatura, por muchos factores.
Después de asistir a clases de esta asignatura durante este cuatrimestre, la sensación que me queda es esa, la de saber que si crees en algo, tienes que poner todo tu empeño, dar lo mejor de ti, aprendiendo de los fallos cometidos pero siempre con constancia y trabajo, para conseguir aquello que deseas.
La gestión y organización de una clase es algo primordial para que pueda funcionar tal y como el maestro/a desean, pero siempre y cuando tenga en cuenta las circunstancias de cada alumno, por consiguiente, de ningún modo, el docente podrá conectar con el alumno si no lo conoce, sin tratar con el, sin saber cuales son sus dificultades y saber hasta donde puede llegar.
De este modo, en el momento que conocemos al niño, que sabemos cuales son sus inquietudes, que podemos destacar sus valores y competencias, conocer cuales son sus metas, podremos guiarlo por el camino que nosotros, como maestros sabremos que será el mejor para él.